Carta para un...

Una joven llena de capacidades a pesar de tantas ocupaciones nunca dejó a un lado su fuente estabilizadora de emociones, la danza.

Un día se encontraba muy juiciosa estudiando para finalizar los estudios del tercer semestre, en tal instante el director de la compañía artística en la que ella se encontraba la buscó para decirle que en quince días saldrían de gira por Europa durante un mes, ella con gran alegría pero al mismo tiempo confusa no supo que decir, puesto que se encontraba en finales y se veía complicado poder asistir, su director viendo su silencio  le pregunta ¿Qué sucede no te alegra?, sí, dice ella con cierta preocupación,  pero te noto muy baja de nota, te pasa algo? Le pregunta su director, ella le dice: realmente me siento preocupada por la gira porque me encuentro en finales y pues no sé que hacer, pero eso no es problema tu puedes enviar una carta a la facultad comentando la situación y posiblemente te ayudaran.

Pasados tres días Mariana recibe la respuesta de la carta que le envió a la facultad en la que le respondieron apoyando su situación, inmediatamente se comunicó con su director quien la felicita por haber logrado que con sus palabras las directivas de la facultad le aceptaran irse de gira.

Todo fue un acontecimiento, el arte en la danza siempre tuvo un gran espacio en su vida alterno a sus estudios, la gira fue una gran experiencia para su carrera artística, los esfuerzos para responder con su carrera se reflejaban dia a dia eliminando de cierta manera muchas salidas con sus familiares y  amigos ahora ella se siente plena y satisfecha por haber incursionado en el arte de danzar y expresar por medio de su cuerpo alegría, tristeza, euforia y muchos mas sentimientos que el movimiento corporal puede reflejar.